Emplazamientos casi imposibles
1. Historia Documentado el año 1041. Actualmente lo que más resiste a la destrucción y el tiempo es la la iglesia, dedicada a la advocación de Sant Miquel que en sus incios fue parroquia del lugar, cedida en el año 1148 por el Bisba de Barcelona Guillem de Torroja a la Comunidad de Canónigos Regulares de la Órden de Sant Agustí, Comunidad que se habia trasladado al lugar desde Sant Ruf d' Abinyó. Más adelante la iglesia serviria de muralla del conjunto del castillo de Marmellar mientras que su ábside es como una torre del recinto. La iglesia es de nave única con vuelta de cañón y arco obal, ábsides semicirulares, con arcuaciones, lesanas y aparejo regular. La vuelta de cañón aun conserva la humedad de las cañas utilizadas en la construcción. En uno de los laterales de la nave se adosa una capilla lateral rectangular, también con vuelta de cañón, conservándolo sobre una gran roca natural. Interiormente estaba decorada con pinturas murales que actualmente se conservan en el Museo Nacional de Arte de Catalunya. En cuanto al castillo pocos datos se encuentran y se sabe que por el año 1375 consta como propietario Bertran de Gallifa. Si bien actualmente presenta un aspecto muy ruinoso, todavía se distinguen numerosas almenas y aspilleras. Situado en una zona montañosa bastante complicada, este castillo dominaba una amplia e importante región. Los restos que se conservan son interesantes, aunque poco a poco la maleza quiere ocultar su esplendor.
2. Aspilleras y almenas
— Aspillera también llamada arquera, saetera, lancera o ballestera es una abertura vertical, fina y profunda, practicada en algunos muros o murallas defensivas, así como en las torres de los castillos o incluso en algunas almenas, permitiendo disparar flechas con arcos o bien con ballestas. Para facilitar este fin, la delgada ranura se ensancha hacia el interior, de modo que se facilita su finalidad y a la vez protege al arquero o ballestero mientras que este lanza los proyectiles. Con la aparición de una nueva arma de tiro, la ballesta, el diseño de las aspilleras evolucionó, adaptándose por tanto a las necesidades y adquiriendo así la forma de una cruz.
— Almenas o merlón llamado impropiamente almena, es un elemento arquitectónico típico de la arquitectura militar medieval. Se trata de cada uno de los salientes verticales dispuestos a intervalos regulares que coronan los muros perimetrales de castillos, torres defensivas, etc. Los espacios abiertos que se encuentran entre los merlones, es decir, las almenas en sentido estricto, se denominan usualmente cañoneras ya que por ellos asomaban las bocas de los cañones. La función principal de los merlones era la de defensa pasiva protegiendo así a los habitantes de la plaza de los asediantes o para contraatacar garantizándose cierta protección. También podían funcionar como defensa activa pudiendo ser retirados lanzándolos sobre los atacantes que intentaban escalar los muros o que se agrupaban delante de la puerta. En los edificios medievales se distinguían tradicionalmente los siguientes tipos de merlones. Los merlones güelfos, que tienen la parte superior cuadrada. Los merlones gibelinos que tienen la parte superior en forma de cola de golondrina. El uso del merlón en la época de las armas de fuego deviene puramente decorativo y tiene un periodo de renacimiento en el siglo XIX, en el periodo romántico-neogótico. |
— Cómo llegar? Se llega desde Igualada por la carretera C-37 dirección Santa Margarida de Montbui y Valls. Desde Igualada a la glorieta de Miralles hay 19 Km. En la glorieta de Miralles (a mano derecha hay una gasolinera) tomar la tercera salida por la BP-2126 dirección La Llacuna y Vilafranca del Penedès. Continuar por esta carretera hasta el cruce que conduce a la derecha a Sant Marti Sarroca y a la izquierda por la BV-2122 a Torrelles de Foix. Desviarse por la derecha. A menos de un Km antes de entrar en el poblado y a la altura de la zona industrial hay un diminuto cartel a mano derecha que indica que a pocos metros a mno izquierda esta el desvio al Castillo de Marmellar. El camino es sinuoso, muy pedregoso y en mal estado, hay que andar por terrenos elevados cruzando zonas boscosas. Si le agrada la aventura será sumamente divertido. A unos 10 Km que le parecerán mucho más encontrará las ruinas del Castillo de Marmellar entre la maleza en un elevado montículo. Por este camino solo es posible pasar con vehículo todoterreno o 4X4.
Mapas físicos Google opción 'cómo llegar'.
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